Los hermanos Coen son de los mejores directores de la actualidad (junto con los hermanos Safdie, los hermanos Russo y los hermanos Duffer), ellos construyeron su propio universo cinematográfico con el que convierte las historias más “normales” en realidades extrañas, complejas y enredadas. Su estilo es realista, pero con toques locos, oscuros, pero divertidos, y con personajes que, en más de una ocasión, se olvidan de su propia moral para avanzar en la historia.
Las películas de los Coen son identificables con solo los primeros minutos y eso se debe a que, a lo largo de su carrera, han usado unos cuantos sellos y elementos en común que son parte de su identidad y que, lejos de ser un limitante, los ayuda a explorar la humanidad y sus mejores y peores cualidades de una forma muy divertida.
Tal vez ni siquiera los hermanos entienden cómo lo hacen, pero ese no es el punto, lo importante es que, a lo largo de su carrera, nos han dejado grandes películas y personajes que marcaron la cultura pop y la industria. Muchas de sus películas, como Fargo y The Big Lebowski, están consideradas como películas de culto, principalmente porque, sin importar cuánto tiempo pase, están hechas de tal forma que no parecen viejas o anticuadas, y cada nuevo fan en potencia que decide verlas se convierte instantáneamente en un seguidor del culto.
¿Cómo puedes identificar las películas de los Coen? El mismo Ethan dijo en una ocasión que ellos no tienen una filosofía en especial, pero, al ver sus películas, hay unos cuantos temas recurrentes. El trabajo de Ethan y Joel Coen siempre tiene un crimen que salió mal, castigos en lugar de justicia, protagonistas que son sus propios peores enemigos, un estilo midwestern, al compositor Carter Burwell, unos cuantos actores familiares (ellos, como Wes Anderson o Tarantino, también tienen sus favoritos), referencias culturales y viajes que representan un crecimiento personal para los protagonistas.
Más allá del técnico o los detalles, los Coen son de los voces más interesantes y extrañas del cine americano, y tienen la fórmula perfecta que hace que quedes atrapado en la historia y quedes enganchado con cada detalle.
¿Cuáles son las mejores películas de los hermanos Coen?
The Big Lebowski, 1998
Esta no es solo una de las mejores películas de los Coen, es una de las mejores en la historia del cine, y una de las más grandes películas de culto de los 90. The Big Lebowski es una mezcla entre novela de misterio y pintura surrealista, con toques absurdos. Jeff Bridges da vida a un hombre que, después de una confusión, se ve involucrado en un caso que lo lleva a toparse con una serie de personajes extraños y extravagantes, todo por una alfombra arruinada que quiere que le paguen.
Fargo, 1996
Esta es una película clave para entender el estilo único de los Coen y su afinidad por mostrarnos una mejor versión de la aburrida vida real. Fargo, nominada a 7 premios Oscar, está considerada como una de las mejores películas jamás hechas, que revela el lado más extraño de la humanidad con personajes carismáticos como el de Frances McDormand, que le valió un Oscar. Los hermanos Coen usan la violencia y la comedia para llevarnos a un pequeño pueblo que queda marcado por un brutal crimen, cometido por un par de tontos que son derrotados por una muy persistente policía embarazada.
No Country for Old Men, 2007
La adaptación del trabajo de Cormac McCarthy nos dejó a uno de los mejores villanos del cine, el Anton Chigurh de Javier Bardem. Este thriller psicológico (uno de los mejores de la historia) al estilo western está lleno de tensión y humor, que no deja de ser brutal. En esta historia de venganza, la violencia se desata después de un negocio de drogas que sale mal, ahí es donde conocemos a un villano fanáticos de los juegos mentales y de torturar a sus víctimas antes de matarlas.
Barton Fink, 1991
Esta película no es tan famosa como Big Lebowski o Fargo, pero sin duda es de las imperdibles de los Coen, quienes nos cuentan la historia de un escritor (John Turturro) que, mientras intenta hacerla en grande en Hollywood, descubre que la industria no es tan brillante o glamorosa como se imaginaba, y acaba distraído con la historia de un vecino que esconde un secreto oscuro. Esta película fue una de las favoritas del Festival de Cannes de 1991 y se llevó la Palme d'Or y premios en las categorías de Mejor Director y Mejor Actor.
A Serious Man, 2009
Después de Burn After Reading, los Coen decidieron hacer una película solo para ellos, el resultado fue esta comedia ubicada en Minnesota de los años 60, en los suburbios en los que ellos crecieron. La película, con música de Jefferson Airplane, es una interpretación del libro de Job en la que Larry Gopnik, un profesor de física del Medio Oeste, observa cómo su vida se desmorona a causa de una serie de incidentes inesperados. En esencia, esta es la historia de un hombre común intentando mantener su dignidad y encontrar el sentido de su vida en medio de un caos que no puede controlar.
Inside Llewyn Davis, 2013
Esta película sin duda merecía un reconocimiento en los premios Oscar, pero la ignoraron. Esta es una comedia negra sobre la escena folk en Greenwich Village de los años 60 y es la más diferente al resto de sus proyectos. Protagonizada por Oscar Osaac y Justin Timberlake, esta película es melancólica y captura la frustración de los artistas intentando alcanzar la fama, todo contado en una semana en la vida de un joven músico.